B. A.

No recomendaría esta residencia porque son bastante opacos, no te dejan ir a las habitaciones sin supervisión o sin una cita de antelación una semana, de hecho murió mi familiar y no me dejaron recoger sus pertenencias personalmente, me las devolvieron en cajas, algo que debería de ser bastante personal, fue frío y poco amable. Se muestran poco disponibles a que circules por la residencia cuando deberían invitarte a pasar y disfrutar de las instalaciones, solo me dejaban estar en la entrada o en una sala. La persona de la entrada es bastante opaca en información, no conseguía que me dijera que días estaba el médico (no está todos los días?) o concertar citas con cualquiera se retrasaba una semana, bastantes problemas con el dinero de bolsillo o asignación al principio, cuestionaba los motivos por los que solicitaba hablar por teléfono con personal interno, muy ruda y antipática. Perdieron una cita médica, haciendo que se retrase tratamientos y empezar de cero pruebas que llevan tiempo (datos que me dijeron médicos del Arnau y por supuesto mi familiar), en otra ocasión la medico del hospital al dar de alta a mi familiar me indicó las siguientes citas médicas que constaban en el documento del alta, cuando llame a la semana siguiente parece ser que misteriosamente se había cancelado una de ellas, sigo esperando el motivo. La directora tienes suerte si te atiende. La trabajadora social la más amable. La comida es muy escasa y mala. Solo les dejan toallas una vez a la semana los domingos, cuando los duchan y se las retiran. El resto de la semana no tienen o han de solicitarlas cuando deberían de estar siempre disponibles. Si tu familiar tiene problemas serios de salud o dificultad en la movilidad mejor no lo traerlo a esta residencia. No me llamaron para avisarme que de un día para otro había perdido movilidad e iba en silla de ruedas repentinamente, fui a visitar a mi familiar y estaba así. Eso si después de un ingreso me llamaron para decirme que estaba llagado... nada que ver una cosa con la otra, ni tiene la misma importancia. En lugar de solicitar una silla de ruedas, lo llevaban en un sillón con ruedas. No me parecen soluciones razonables. Escribiría más pero no me apetece recordar.

R.

Veo mucha dejadez y poca profesionalidad